La limpieza dental con ultrasonido es un procedimiento seguro y efectivo que ayuda a mantener una buena salud bucal y prevenir problemas dentales más graves, como caries y enfermedades periodontales. Se recomienda que las personas se sometan a una limpieza dental profesional con regularidad, generalmente cada seis meses, aunque la frecuencia puede variar según las necesidades específicas de cada paciente. Además, es importante mantener una buena higiene oral en casa, cepillándose los dientes al menos dos veces al día y usando hilo dental regularmente.

Las resinas dentales ofrecen varias ventajas, como su capacidad para coincidir con el color de los dientes naturales, lo que las hace estéticamente atractivas y adecuadas para restauraciones en dientes visibles. También conservan la estructura dental existente, ya que se adhieren directamente al diente, lo que ayuda a fortalecerlo y minimizar la pérdida de tejido dental.

Las prótesis dentales fijas tienen como objetivo reproducir la anatomía de los dientes que, o bien se han perdido, o bien están dañados, pero no se han caído. Se denominan fijas ya que no pueden ser retiradas por el paciente, se encuentran cementadas. Dado que existen diferentes tipos de prótesis dentales fijas, es necesario ser valorado por el odontólogo para determinar cuál es la más adecuada para el paciente, así como otros aspectos del tratamiento (precio, duración, material, etc).

La prótesis dental removible es un tratamiento que se basa en un aparato externo y que servirá para sustituir la falta de piezas dentales y estructuras óseas atrofiadas por el paso del tiempo. Son aparatos bucales, portadores de dientes artificiales. Estas se pueden y deben extraer de la boca para limpiarlos más fácilmente.
Son aparatos que mejoran la masticación de los alimentos, la estética bucal y el habla. Algunas de ellas se sujetan sobre los dientes naturales con dispositivos rígidos (retenedores o “ganchos”) y, a veces, descansan sobre el hueso.

Las coronas dentales o fundas son unos elementos confeccionados para recuperar el tamaño de diente, tanto de forma funcional como estética.
Actúan como protector del diente, ya que lo abrazan de forma periférica rodeando todo el perímetro del diente. Gracias a este tipo de tratamiento dental, es posible devolver a un diente o varios dientes en mal estado su forma, tamaño y color ideal. El material de Zirconio puede emplearse tanto sobre dientes como sobre implantes dentales.

El blanqueamiento dental es un tratamiento que se aplica a los dientes que han cambiado de color, siendo uno de los tratamientos estéticos más conservadores con el tejido dentario.
Con este tratamiento se consigue cambiar el tono del color de los dientes, dejando estos más blancos, luminosos y devolviendo el brillo natural del esmalte dental.

La Ortodoncia es una rama de la Odontología que mejora la posición de los dientes y de los huesos donde se ubican estos dientes, corrigiendo las alteraciones de la mordida.
El ortodoncista es el encargado de mover las bases óseas y los dientes para que encajen correctamente, devolviendo la función y estética adecuada al paciente.
Dentro de los tratamientos de ortodoncia existen diferentes técnicas:

Brackets metálicos: son los brackets convencionales cuya composición está basada en el acero inoxidable. Son una técnica muy recomendada en niños y adolescentes.
Brackets transparentes: existen diferentes materiales que se emplean para su fabricación, destacando los brackets transparentes de zafiro que se mimetizan con el diente.
Brackets de autoligado: son brackets que ofrecen menos fricción a la hora del movimiento dentario.
Alineadores transparentes: es lo que se conoce actualmente como ortodoncia invisible. Se trata de una serie de fundas o placas transparentes que se van cambiando periódicamente, generando el movimiento de los dientes del paciente hasta llegar a la corrección. Esta técnica ofrece bastante estética, pero el paciente ha de ser consciente que es necesaria su colaboración.

La endodoncia es un procedimiento que tiene como finalidad preservar las piezas dentales dañadas, evitando así su pérdida. Para ello, se extrae la pulpa dental y la cavidad resultante, se rellena y sella con material inerte y biocompatible.